Sergio Mejía Cano
Fue el mismo gobernador del estado de Nayarit, doctor Miguel Ángel Navarro Quintero, quien dio a conocer en su conferencia semanal, que se habían descubierto infinidad de medicamentos ya caducados, así como un tomógrafo, con valor de 18 millones de pesos arrumbado en el almacén de la Secretaría de Salud; y se habían detectado desvíos millonarios con deudas al SAT, así como una deuda de 800 millones de pesos y además, ultrasonidos y uniformes sin utilizar y lo peor: facturados en una enorme cantidad económica que no corresponde a la calidad de los productos.
bargo, esto podría ser nada más la punta de un enorme témpano (iceberg) que, no nada más esté presente en esta entidad del occidente del país, sino en la mayoría, si no es que en todo el país, pues es bueno recordar que, en su momento, se dio a conocer que el sistema neoliberal implantado desde el gobierno de Miguel de la Madrid Hurtado (1982-1988), hasta el mandato de Enrique Peña Nieto que culminó en noviembre de 2018, de que la meta era adelgazar el sistema de Salud en México, privatizando este sector dejándolo al mejor postor, sin contemplar a la población de a pie, dejándola al garete, pues la meta sería que quien tuviera acceso a médico y medicinas las pudiera pagar por sí mismos y quien no, pues ni modo, al fin y al cabo ya se había implementado el mentado Seguro Popular que, de acuerdo a infinidad de analistas e incluso por el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, señalan que en sí, no era seguro ni era popular.
Todo este medicamento que descubrió el mismo gobernador nayarita, con fecha de caducidad ya vencida, por supuesto que se podría considerar como un acto por demás criminal, pues gran parte de la población se vio en la necesidad de tener que comprar sus propios medicamentos sacrificando su bolsillo; pero hubo gente que no pudo hacer este gasto por lo que, al no poder medicarse, pues a sufrir las consecuencias que esto conlleva.
Una de las críticas a la actual administración federal, es la del desabasto de medicamentos; sin embargo, lo descubierto por el gobernador de Nayarit, podría ser la tónica en la mayoría de las entidades o en todo el país, atendiendo instrucciones superiores de que así hayan recibido los medicamentos requeridos, mejor se almacenaran y no se repartieran, para dar a entender de que había una mala administración en cuanto al abasto de medicamentos y, como Juan Pueblo no tiene la capacidad o los medios para investigar, se atenía a lo que le decían en las farmacias del Sector Salud, de que sus medicinas indicadas en sus recetas no había en existencia; pero ahí estaban ya almacenadas y esperando el tiempo de caducidad o el momento adecuado para comercializarlas por otro lado; porque es un hecho ya documentado, de que era una costumbre anteriormente el que gran parte de los medicamentos etiquetados para el Sector Salud, se les daba otro destino muy diferente al original, que se vendían a farmacias privadas o a todo tipo de distribuidores para surtir al comercio tanto formal como informal.
Desde luego que no es poca cosa el hecho de que se hayan encontrado tantas medicinas almacenadas y ya caducadas, y tan no es poca cosa, porque es un claro atentado a la salud de la población, al erario y, obviamente, una burla a todo México. Así que, si se le escarba a fondo tal vez se podría llegar al meollo del asunto y descubrir que, a nivel nacional es la misma situación, dando a entender ser parte de un complot para hacer quedar mal a la actual administración, señalándolo como incapaz de abastecer de medicamentos al Sector Salud y, no nada más de los más caros y necesarios, sino hasta de los más comunes
Con razón se ha dicho y hasta reconocido y publicado por el mismo presidente López Obrador, de que cómo era posible que se gastaran más de 100 millones de pesos anualmente en medicamentos y nunca había en existencia, pues el clamor popular es el faltante de medicamentos contra el cáncer, para diálisis, para el corazón, para la diabetes y un largo etcétera que a diario se dice que faltan, que no hay; sin embargo, con esto que descubrió en forma personal el mismo gobernador del estado de Nayarit, tal vez sí estén todos estos medicamentos almacenados, pero con la orden de no repartirlos, sin importa que, quienes requerían de estos medicamentos se agravaran de sus males y fallecieran irremediablemente, todo, con el fin de desestabilizar a esta administración que, por lo que se ve y de seguir así, seguirá pisando callos.
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