Articulo de Opinión

Pandemia y elecciones en Bahía De Banderas

Gualberto Maldonado Morales

Miércoles, 29 de Julio del 2020. 2:02:01 am

Letra más grande

El municipio de Bahía de Banderas ocupa el segundo lugar en el estado de Nayarit por el número de contagiados y defunciones provocados por el coronavirus Sars Cov 2 que ataca a prácticamente todo el mundo. Las medidas adoptadas para contener la pandemia son las mismas que en el resto del país. Se practicó la sana distancia durante la jornada nacional y en la medida de lo posible se llevan a cabo las demás medidas por la población. Como en todo el estado, el virus, en lugar de replegarse ha incrementado su virulencia y las instancias del gobierno no saben siquiera cuando va a llegar el punto de inflexión que permita afirmar con seguridad que la pandemia está en declive.

La irresponsabilidad de varios funcionarios del gobierno federal y estatal al llamar a la población a retomar la normalidad ha provocado un mayor número de contagios y fallecimientos, de tal manera que no es raro que el pueblo ya no tome en serio lo que dicen los funcionarios encargados del tema y aun lo que diga el presidente de la republica que es el primero en provocar el desorden y la irresponsabilidad.

Pero la pandemia ha provocado que se agudice el desempleo y la pobreza. Al día de hoy un sinnúmero de trabajadores no regresan a sus puestos de trabajo lo que ha provocado a su vez la carencia de recursos para sobrevivir, para sostener a la familia, para darles apenas de comer. Ante esta situación las autoridades estatales y municipales han adoptado una actitud demasiado tibia y solo le han apostado a entregar unas cuantas despensas para unas cuantas personas, que en definitiva no puede significar un verdadero apoyo para el pueblo. En el municipio de Bahía de Banderas el alcalde apenas alcanzo a repartir apoyos de 400 pesos al inicio del periodo crítico y de 200 pesos en la parte intermedia del periodo sin que el grueso de la población sintiera el verdadero espaldarazo para resolver la dura situación por la que atraviesa. Estos ?apoyos? pues pasaron a la historia sin pena ni gloria.

Este vacío provocado por la ausencia (¿intencional?) de la autoridad ha sido aprovechado por personas que se han dedicado a repartir ?apoyos? cuyo objetivo está muy lejos de la solidaridad humana elemental y de la comprensión del sufrimiento del pueblo. Se han dedicado a repartir apoyos con el objetivo de hacerse de un capital político de cara a las elecciones que vienen. Tanto se ataca, acusa y calumnia a organizaciones sociales porque ?medran? con la pobreza, pero nada se dice de los personajes que se aprovechan de las desgracias humanas para conseguir objetivos aviesos y de estos pululan muchos por el estado y en Bahía de Banderas ni se diga.

Por lo visto, todo parece indicar que más de uno de los candidateables está decidido a construir su plataforma electorera sobre las víctimas de la pandemia. Así podemos ver que a unos vecinos se le convoca a una concentración-sin importar el peligro de contagio- para regalarles tacos de carnitas y a otros se les llama para darles despensas, pero solo les entregan un vaso de leche con pan. El pueblo usado como carne de urnas.

El pueblo, obligado por la necesidad y por la ignorancia que ha sido prohijada por el sistema como mejor arma para garantizar la manipulación permanentemente, ha caído en las garras de estos vivales ¿Qué soluciones ofrecen a los grandes y verdaderos problemas que aquejan a la población badebadense? Ninguna. Lo que ofrecen son despensas condicionadas, alimentos en la calle al pueblo necesitado pero ninguna solución que ataque de fondo las necesidades del pueblo.

Las calles del municipio de Bahía de Banderas están totalmente destruidas, y eso que aún no se establece de lleno la temporada de lluvias; hay cientos de desempleados que están esperando un verdadero apoyo material y económico para seguir soportando las difíciles condiciones provocadas por la pandemia y ahora ya convertida en una seria crisis económica. No hay obra pública de impacto que realmente cambie las condiciones de vida de la población. Hay amenazas permanentes de desalojos a un gran número de familias que viven en los fraccionamientos populares que hay en todo el municipio, desalojos a los cuales se suma sin ningún rubor la policía municipal, presta y solidaria ?para aplicar la ley? mientras crece la inseguridad en el municipio a tal grado que la población la percibe como el principal problema.

En la colonia Villas Miramar, y en asamblea abierta el alcalde asumió compromisos para hacer obra pública que hasta el momento no ha cumplido. Lo peor es que la actitud que los funcionarios del ayuntamiento muestran es que no va a cumplir porque las enarbola una organización social: Antorcha Campesina. La última respuesta que dio el secretario del ayuntamiento fue acusar a voz en cuello de ?corrupto? al líder antorchista en la zona. Obviamente no demostró su dicho, pero es evidente que el objetivo es denostar el liderazgo antorchista para no cumplir sus compromisos.

No solo eso, ahora desde las esferas del poder municipal impulsan a un grupúsculo compuesto por verdaderas fichitas que la comunidad tiene perfectamente identificados entre acosadores sexuales, invasores y traficantes de lotes en la misma colonia. Esos son los ?representantes? del pueblo que impulsa y apoya el ayuntamiento para detener los justos reclamos de los habitantes de la colonia Villas Miramar. Por lo pronto y a manera de recordatorio, el presidente municipal debe introducir el drenaje en toda la zona donde falta este servicio, debe cumplir con la pavimentación de las 10 calles comprometidas y terminar de dar la autorización para la introducción de la energía eléctrica. Sobre este último asunto debemos recordar que la CFE estaba iniciando la obra el 8 de mayo de 2018 con recursos gestionados por el pueblo organizado en Antorcha y el principal mérito de la presidencia de Bahía de Banderas fue haber detenido la obra hasta el día de hoy mientras los vecinos corren el peligro de sufrir accidentes por que la energía llega de manera provisional.

La gente de Villas Miramar no quiere leche con pan. Lo que reclama son las obras comprometidas por la presidencia para mejorar su vida. Si quiere ganar elecciones, el partido que sea debe comprometerse en serio con su pueblo, hacer verdaderas transformaciones que le mejoren la vida y se dejen de la demagogia de despensas y otras migajas. El pueblo debe politizarse, debe despertar y reclamar lo que le pertenece y rechazar el trato de limosneros que le otorgan los politiquillos de siempre. Nada más, pero nada menos.